

Vimos renos, había uno con una cornamenta exagerada, pero como no se estaba quieto, salió mejor la foto de ésta que estaba tumbada.
Aquí tenemos a los ciervos, que por cierto, también estaba Bambi pero tumbado echando una siesta.
Los sarrios no paraban de subir y bajar por ese trozo de montaña y esas piedras, era todo un espectáculo.
Esta cabra no sé si es que se sentía observada y estaba posando o qué, pero no se movió de esta posición en todo el rato que estuvimos allí.


Castañ, como está hecho un toro, iba el primero con los niños; nosotros nos entretuvimos un buen rato con los lobos y a él le dio tiempo de echarse la siesta del carnero.

Luego fuimos a comer a un restaurante en el mismo pueblo y hubo un pequeña tormenta (Castañ quería ver una tormenta en la montaña), con granizo y todo..... no estuvo mal.
Marta
1 comentario:
A ver quién está "on line" a las 15:00? Pone que estamos 2
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