jueves, 15 de julio de 2010

Viaje de chicas a Berlín, día 9 de julio de 2010.

Queridos Sedenautas, aunque parecía que no, por fin llegó el día del viaje. Salimos sobre las 7 de la mañana más o menos de la plaza Mayor y llegamos a Barcelona, no recuerdo la hora, pero a punto para subir al autobús lanzadera que nos llevaría a la terminal C.Por supuesto ya empezamos con las fotos y también a darnos a conocer con el chófer.

Llegamos bien a Berlín, fuimos al hotel y enseguida a comer, que ya era hora!! Qué gran intérprete teníamos, así se puede ir a cualquier sitio, sólo hubo un pequeño mal entendido con el pan, pero no pasa nada.
Bueno, esto es ni más ni menos un café que no sea expresso por favor!!!! (el expresso es muy cortito y esto es lo otro!!! ja ja ja

Por el año 1961, un psicólogo Berlinés creó el Ampelmann, un muñeco similar a un policía que durante años simbolizó el respeto a la ley en Berlín oriental. Después de la caída del muro y la reunificación alemana, a finales de los años 80, quisieron ‘retirar’ la figura, y esto provocó un gran escándalo entre los habitantes del lado oriental.
Ahora todo el mundo vive al lado de uno, tal y como lo desearon y millones de turistas lo fotografían (nosotras no íbamos a ser menos).
Hay rincones que dependiendo del ángulo puedes ver hasta seis en la misma esquina.


Después de comer nos fuimos a dar una vuelta por el barrio del hotel y precisamente allí cerca estaba el Shloss Charlottenburg.
El castillo de Charlottenburg se encontraba en una ciudad cercana a Berlín llamada Charlottenburg, que original. Con el crecimiento de la ciudad fue aglutinado en el año 1920 dentro de la zona metropolitana. Este castillo fue construido el año 1705 y pertenecía a la familia de los Hohenzollern.
Su estilo es prusiano y tiene unos bellos jardines barrocos. Cuando llegamos cerraban la verja, así que nos contentamos con verlo desde fuera.
En la Segunda Guerra Mundial sufrió bombardeos que le dejaron casi en estado de ruina, estuvo muy cerca de acabar derribado pero finalmente y por fortuna se decidió reconstruirlo.

Después de esa corta visita al castillo decidimos que lo mejor era dar una vuelta por el Tiergarten, que, en sus primeros años fue una zona de caza y posteriormente pasó a ser una gran zona verde para uso y disfrute de los berlineses. Tiergarten significa jardín de animales, en recuerdo de cuando era lugar de deleite de la aristocracia prusiana como coto de caza de jabalíes y ciervos.
En el centro del Tiergarten se alza la Columna de la Victoria, de 62 m de altura, erigida en memoria de la victoria prusiana frente a Dinamarca en 1864. Tras victorias sucesivas frente a Austria, en 1866, y Francia, en 1871, se coronó su estructura con una estatua de 35 toneladas recubierta de oro que representa a la diosa Victoria.
Desafortunadamente, estan restaurándola y no pudimos verla ni subir a su mirador.
Así es como es en realidad...... por cierto, cerca de esta columna, en el parque, la gente se despelota que da gusto; nosotras íbamos dando un paseo por el parque y de repente vimos a unos tumbados en la hierba en calzoncillos, a otros desnudos, tumbados, paseando, etc. La guía del día siguiente nos dijo que era bastante normal verlos por cualquier parque de Belín, la ciudad de las libertades, nadie dice nada!

Después de atravesar todo el parque con un calor exagerado y muchísima sed, descubrimos a nuestra derecha la Postdamer Platz, donde palpita el corazón de la nueva metrópolis de Berlín. Esta concurrida plaza, con sus cines, restaurantes y tiendas, era ya muy popular en los años veinte. Tras la II Guerra Mundial se convirtió en un desolado descampado, pero desde la caída del muro se ha convertido en una ciudad dentro de la ciudad, rodeada de imponentes edificios construídos en los últimos diez años, a los que se suman continuamente otros nuevos.


La cúpula que se ve arriba es la sede central de Sony en Europa, se le llama el Sony Center.
Y, como dato curioso, cuando estábamos tomando una cervecita oímos una voz que nos dijo: sois de Ballobar???? Nosotras, síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii !!!! era un chico de Barbastro con su novia, qué ilusión, foto!!!

Aquí la Pedreta con su cerveza...............


Después pasamos por el Memorial a las víctimas del Holocausto, fue idea del arquitecto estadounidense Peter Eisenman, que ha distribuido 2.711 bloques de hormigón en filas y columnas que recuerdan a un cementario. Él dice que no lo es.
Eisnman explica que su obra, percibida como un laberinto desde el interior, pretende reflejar y hacer sentir a los visitantes la misma angustia y desorientación que padecieron los prisioneros de los campos de concentración nazis.
Son 2.711 bloques de hormigón de distintas alturas (desde el suelo hasta casi dos metros) situados en lo que hasta hace muy poco era un descampado de 19.073 metros cuadrados.
Los visitantes podrán tocar los bloques, sentarse sobre ellos, comerse un bocadillo encima, lo que quieran, pues Eisenman no quería construir algo que recordara a un cementerio -por eso no hay inscripción alguna en el conjunto-, y lo único que no estará permitido es saltar de uno a otro, por motivos de seguridad. (cosa que nosotras hicimos porque no sabíamos que estaba prohibido).
Y, por fin llegamos al Puerta de Brandeburgo, el más célebre símbolo de Berlín, que se alza orgullosa en el centro de la Pariser Platz, destacando entre un conjunto de ultramodernos edificios de embajadas. Coronada por una cuádriga triunfante, la puerta ha sido testigo privilegiado de momentos cruciales de la historia de Berlín.


Por cierto, nosotras pasamos por el arco del medio que era por el que sólo podía pasar "la realeza".



Pariser Platz.................



Y, una cosa muy curiosa, que no probamos porque no tuvimos tiempo y cuando lo tuvimos hacía un calor tan horrible que no apetecía pedalear al sol....... la bicicleta cervecera, el carro de la cerveza o como queráis llamarlo, hasta 14 personas pedaleando y bebiendo cerveza por las calles de Berlín, ja ja ja .

Nada más, después de otra caminata, vamos a cenar y a dormir..... que mañana va a ser otro día completito.
A ver si puedo poner mañana el segundo día y tercer días.
Marta

2 comentarios:

Cris Peque dijo...

Muy bueno el reportaje, Marta. Lo de saltar por encima de los bloques no es una cosa muy rara.

Inma dijo...

QUe Chuuuuulo!! me encanta el reportaje Marta, como no he estado por casa me he alegrado de ver hoy las fotos. Que sorpresa más buena, ya veo que te da tiempo de trabajar y de alegrar a las amigas. Gracias!!!